Lo que diferencia básicamente a la iluminación LED del resto de luces es que se basan en un semiconductor que emite luz al aplicarle una pequeña corriente eléctrica y generan u menor consumo, y por ello un mayor ahorro.
Este dispositivo semiconductor con el que cuenta un LED está normalmente encapsulado por un recubrimiento de plástico con más resistencia que las cubiertas de vidrio que habitualmente se emplean en las bombillas normales.
Ventajas del LED en el hogar
Hace unos años, cuando el LED comenzó a comercializarse, no entendíamos muy bien cuántas y cuáles eran las ventajas de este tipo de luz en los hogares, y probablemente lo único que veíamos es que cada bombilla era más costosa que el resto.
Pues bien, como todo en la vida, la tecnología avanza y cuando surge con un avance importante suele incrementar el coste, pero en el LED, como en casi todo lo que se innova en tecnología, es mucho mayor el ahorro que el coste, ya que el ahorro es mayor incluso que en las denominadas de bajo consumo.
Los LEDs son diodos emisores de luz, es decir, un dispositivo que cuenta con dos electrodos por los que circula la corriente eléctrica en una sola dirección, y están diseñados con materiales semiconductores, como es el caso del silicio.
Estas luces son frías, lo que implica que no producen calor, lo que es perfecto cuando se está en climas con temperaturas cálidas, y además pueden otorgar color a tus espacios, de manera sencilla y duradera.
Entre sus ventajas se encuentra su eficiencia energética, es decir, que con un 90% menos de energía, se genera la misma luz que una bombilla tradicional, y de ahí el ahorro del cual hemos hablado.
Pero también se ahorra, aunque se precio inicial sea superior, gracias a su elevada vida útil, que pasa de unas 45.000 horas frente a las 2.000 horas que ofrecen las bombillas tradicionales; y esto está en relación con lo que hemos indicado anteriormente, ya que al no generar ni acumular calor, se reduce la posibilidad de que se rompan.
También pueden considerarse ecológicas, ya que están libres de materias altamente contaminantes como el tungsteno (bombillas normales) o el mercurio (fluorescentes), lo que las convierte en reciclables hasta el 100%; y además no utiliza mercurio o gases que producen efecto invernadero e incrementan el calentamiento global.
Pero además, puede decirse que es una iluminación saludable, ya que la mayoría de los sistemas de iluminación, en contraste con las de LED, generan luz UV y luz infrarroja que son dañinas para la salud.
A diferencia de las bombillas de bajo consumo las luces LED se encienden de manera inmediata y otorgando toda su iluminación desde el mismo instante en que se encienden.
Se denominan también iluminación inteligente porque cuentan con la posibilidad de ser controlados de manera remota, mediante una conexión a internet, pudiendo formar parte del concepto de la domótica en la edificación.
También son muy fáciles de instalar, ya que aunque parezca ser un sistema sofisticado, su instalación es muy sencilla; y son elementos seguros porque trabajan con corriente continua de baja tensión, lo cual reduce considerablemente los accidentes domésticos por electrocución y evitan descargas en lámparas y apliques.
Además son muy versátiles, ya que son ideales para crear todo tipo de ambientes al estar fabricadas en diferentes colores. Esta última característica te ayudará a conseguir efectos visuales diferentes dentro de tu hogar, utilizando luz blanca y de colores; y produce una luz nítida y brillante sin parpadeos.
Existen diferentes tipos de LEDs, cada uno con unas características específicas, aun cuando sus ventajas anteriormente expuestas se mantienen, y así, se pueden encontrar cuatro tipos de luces LED para ser usadas en diferentes ámbitos, adaptándose a las necesidades que cada uno tenga; estos son los DIP, SMD, COB y los MicroLED.
El LED DIP es la tipología más básica, y aunque su eficiencia lumínica es inferior a as demás (son utilizados mayormente como indicadores en diferentes aparatos electrónicos) son los más duraderos ya que cuentan con unas 100.000 horas de vida útil, y los más económicos, ya que su carcasa es de plástico.
El LED SMD son diodos que se encuentran encapsulados en una resina semirrígida y los diodos se encuentran encapsulados de manera superficial para poder ser soldado con el circuito; y de esta forma se pueden agregar tres diodos en un solo dispositivo, con diferentes colores, para formar una perfecta luz blanca con su unión. Son mucho más pequeños en general y cuentan con una gran eficiencia.
El LED COB son las más novedosas del mercado, y mucho más económicas. Producen 120 lúmenes por vatio y son ideales para mantenerse encendidas por muchas horas seguidas
El MicroLED es muy utilizado en la fabricación de pantallas y dispositivos, al ser muy pequeños. Ofrecen un excelente tiempo de respuesta lo que es muy práctico, además que ofrece un excelente contraste
El LED como vemos, además de sus múltiples ventajas tiene una gran diversidad de aplicaciones, incluyéndose la decoración de cualquier tipo, y no sólo en los hogares, sino en parques, escenarios, calles e incluso los hemos visto estos años en la decoración navideña.
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